UNA HISTORIA DE MISTERIO, ESOTERISMO Y POLÍTICA EXCELSA EN SU PROPIA SALSA
Ya está a la venta el libro que muchos comentarán, pocos leerán y cuando lo lleven al cine resultará un verdadero bodrio.
A veces, los grandes misterios los tenemos a la vuelta de la esquina...o en la vereda de enfrente... o en el otro barrio... o en donde sea, pero están ahí, y no nos damos cuenta. Aunque cueste creerlo, esos enigmas también aparecen en nuestra Bahía Blanca; es por eso que investigadores del Instituto Superior de Estudios Agroespaciales realizaron una profunda revisión de la obra literaria y pictórica del Licenciado Doctor Intendente Rodolfo Lopes y descubrieron cosas sorprendentes.
A veces, los grandes misterios los tenemos a la vuelta de la esquina...o en la vereda de enfrente... o en el otro barrio... o en donde sea, pero están ahí, y no nos damos cuenta. Aunque cueste creerlo, esos enigmas también aparecen en nuestra Bahía Blanca; es por eso que investigadores del Instituto Superior de Estudios Agroespaciales realizaron una profunda revisión de la obra literaria y pictórica del Licenciado Doctor Intendente Rodolfo Lopes y descubrieron cosas sorprendentes.
“Lopes un genio incomprendido” dice Eleuterio Saldívar, doctorado en Proctología Artística, director del proyecto y autor de “El Código Rodolfo”, un ensayo de reciente aparición en las librerías bahienses. “En mi opinión, él es uno de los grandes pensadores de la época, muy por encima de Rocío Marengo. Lopes pudo entender y proveer lo que le deparaba su destino de gobernante meses antes que todos nosotros, adivinando los oscuros intereses que intentaban socavar su mandato”
Encontramos al Doctor Saldívar en su estudio de la calle Cerrito. La amplia ventana que da a la calle se ve oscurecida por cientos de recortes de “Ecodías”, “La Nueva Provincia” y revistas de la Red Megatone . Una vieja biblioteca con más de 14 volúmenes domina el ambiente. Al leer los títulos de las obras se observa el total eclecticismo y la intensa curiosidad intelectual de su propietario. Allí conviven: “El átomo y la fusión en frío: una visión personal”, del periodista Carlos Quiroga, “A pagar o morir”, del Lic. Santiago Montoya, “Mis Jodas Erróneas”, de Guillermo Cóppola y una incunable edición de “La Metamorfosis” de Kafka con traducción y comentarios de Emilio Turcumán.
“Comenzamos a estudiar a Lopes ni bien asumió como intendente” recuerda Saldívar. “Nos llamaba la atención que siempre parecía querer decir otra cosa diferente a la que en verdad
decía, mientras intentaba hacer otra cosa totalmente distinta a lo que debía. Luego, concretaba lo que a él se le cantaba y decía que no había dicho que iba hacer lo que hizo cuando no hizo lo que debía porque no lo dejaban, o que en realidad dijo lo que dijo porque no lo entendían. ¡¡De movida nomás, todo este acertijo nos pareció fascinante!!”
Agrega el investigador que además de la dialéctica, Lopes también dominó las artes plásticas, mucho más que la medicina. Prueba de esto ha sido la obra “Rendición de Cuentas” compuesto por miles de números dibujados y que data del año 2004. También deben destacarse extraordinarias realizaciones como “El Último Asado” o “La Moni nada Lisa”.
Encontramos al Doctor Saldívar en su estudio de la calle Cerrito. La amplia ventana que da a la calle se ve oscurecida por cientos de recortes de “Ecodías”, “La Nueva Provincia” y revistas de la Red Megatone . Una vieja biblioteca con más de 14 volúmenes domina el ambiente. Al leer los títulos de las obras se observa el total eclecticismo y la intensa curiosidad intelectual de su propietario. Allí conviven: “El átomo y la fusión en frío: una visión personal”, del periodista Carlos Quiroga, “A pagar o morir”, del Lic. Santiago Montoya, “Mis Jodas Erróneas”, de Guillermo Cóppola y una incunable edición de “La Metamorfosis” de Kafka con traducción y comentarios de Emilio Turcumán.
“Comenzamos a estudiar a Lopes ni bien asumió como intendente” recuerda Saldívar. “Nos llamaba la atención que siempre parecía querer decir otra cosa diferente a la que en verdad
decía, mientras intentaba hacer otra cosa totalmente distinta a lo que debía. Luego, concretaba lo que a él se le cantaba y decía que no había dicho que iba hacer lo que hizo cuando no hizo lo que debía porque no lo dejaban, o que en realidad dijo lo que dijo porque no lo entendían. ¡¡De movida nomás, todo este acertijo nos pareció fascinante!!” Agrega el investigador que además de la dialéctica, Lopes también dominó las artes plásticas, mucho más que la medicina. Prueba de esto ha sido la obra “Rendición de Cuentas” compuesto por miles de números dibujados y que data del año 2004. También deben destacarse extraordinarias realizaciones como “El Último Asado” o “La Moni nada Lisa”.
Sin embargo desde el punto de vista esotérico, cobra especial valor el estudio de sus discursos y declaraciones a la prensa. Según el investigador, Rodolfo Lopes comenzó a introducir mensajes dentro de sus mensajes, una suerte de texto encriptado que sólo unos pocos iniciados podían comprender. “Estableció algo así como un meta-discurso que sus seguidores debían interpretar para preservar el Mandato de la Bendita Urna”, - aclara Saldívar – “Para la Hermandad Lopista, este Mandato se hizo Sagrado a partir que sus representantes se instalaron en el Palacio Alsina. Apelaban a él toda vez que los atacaban sus acérrimos enemigos, conformados por una compleja trama de radicales, peronistas, izquierdistas, derechistas, civiles, militares, religiosos, agnósticos, hinchas de Boca, hinchas de River, blancos, negros, amarillos, gays, heteros, pomeranios, gran daneses, chetos, grasas, rolingas, nacionales y extranjeros."
En definitiva: sus acérrimos enemigos eran tantos y tan variados, que dieron en llamar a ese grupo “Orden Reaccionaria Totalmente Opositora” (O.R.T.O.). En el Palacio, la Hermandad Lopista celebraba ceremonias cerradas a celulares abiertos, en donde el selecto grupo de seguidores pinchaban muñequitos del O.R.T.O., extraño tipo de macumba que infringía ardor en sus adversarios. Luego, repartían los sacramentos del Divino Diezmo o de la Mordida Santa, especie de dádivas rituales que para la Hermandad resultaban mucho más sagradas que el mismísimo Mandato de la Bendita Urna.
En definitiva: sus acérrimos enemigos eran tantos y tan variados, que dieron en llamar a ese grupo “Orden Reaccionaria Totalmente Opositora” (O.R.T.O.). En el Palacio, la Hermandad Lopista celebraba ceremonias cerradas a celulares abiertos, en donde el selecto grupo de seguidores pinchaban muñequitos del O.R.T.O., extraño tipo de macumba que infringía ardor en sus adversarios. Luego, repartían los sacramentos del Divino Diezmo o de la Mordida Santa, especie de dádivas rituales que para la Hermandad resultaban mucho más sagradas que el mismísimo Mandato de la Bendita Urna.
LOS MENSAJES OCULTOS
Para Saldívar, desde el inicio mismo de su gestión el 11 diciembre del 2003, el Licenciado Intendente tenía en claro su destino, presintiendo que su flagelación pública sería parte de un designio divino e inevitable, como si su misión en la Tierra fuera convertirse en una suerte de Mesías contemporáneo y municipal. Tal es así que en el acto de asunción del cargo, Lopes dijo:
“SE que a PARtir de esTE cambio se rEnuevan Las esPERanzas y se generan muchas expectativas, perO es Nuestra labor estar a la altura de las mISmas. SoMOs gente senCilla, con REsponsabilidadEs iMportantEs"
Las letras y sílabas destacadas corresponden a números kabalísticos surgidos del logarítmo negativo de los goles recibidos por la Novena División de Villa Mitre, elevados al cuadrado. Al unirse dichos simbólos se forma la siguiente frase:
“SE PARTE EL PERONISMO...¡CREEME!"
En el mismo acto diría:
“RENUevo el coNtrato soCIAl que LA gente me dio el 14 de SePtiembre. EL pueblO nos compromeTió y nos puso A trabajar en eSto.”
Utilizando otra vez el sistema kabalístico y adelantándose a la grave crisis que sobrevendría dos años después, Lopes estaba advirtiendo:
"RENUNCIA... ¡LAS PELOTAS!"
En ocasiones el sistema de encriptación no era tan sencillo de comprender por sus seguidores, por lo que el intendente utilizaba el método de “Sopa de Letras”, pronunciando el principio y el final de la frase como pistas y alterando el mensaje en el medio. Como ejemplo, estas fueron las declaraciones periodísticas posteriores a su asunción:
“ESPERO EstaR a la altura DE las ciRcuNstancias y cuMplir cOn la expectativa que El pUeblo de Bahía Blanca tiene en nosotROS"
Las pistas serían “ESPERO” y “ROS”. La sopa de letras es E- R - DE -R-N-M-O-E-U, que al ordenarlas dice:
"ESPERO MORDER EN EUROS"
Rodolfo Lopes volvió a utilizar nuevamente este sistema de codificación el 25 de Marzo del 2006, al hablar en el hall del Palacio Municipal para anunciar su pedido de licencia debido al llamado “Bahía-gate” o “Papelo-pes”:
“NECESITO qUe MI SociedAd, Mi BahíA Blanca, los que me vOtaron Y los que No me votarOn sepan que tienen un tipo en el Gobierno que no está atornillado a ningún lADO”
Aquí las claves son “NECESITO” y “ADO”, mientras que las letras son U –MI - S – A – M - A B – O - Y – N - O – G. Para los iniciados, el Intendente estaba diciendo:
“¡NECESITO YA MISMO UN ABOGADO!”
Otro material investigado por Eleuterio Saldívar fueron las famosas escuchas telefónicas que surgieron de la intervención judicial de teléfonos celulares a Rodolfo Lopes y Mónica Grimberg, entre otros. El profesional sometió dichos audios a modernos filtros electrónicos, además de pasarlos en forma invertida para buscar mensajes ocultos. El resultado fue sorprendente. Cuenta Saldívar que Lopes y Grimberg organizaban un congreso educativo en la FISA para el que recaudarían $ 50.000 de empresas privadas, aunque en realidad los gastos los solventarían por medio de fondos públicos. En un momento se escucha al Intendente decir:“...entonces nosotros nos quedamos con todo...”
Cuando los investigadores reprodujeron este audio al revés, sintieron la inconfundible voz del intendente diciendo:
“...ENTONCES NOSOTROS NOS QUEDAMOS CON TODO...”
Para Saldívar, los objetivos de Lopes eran inquebrantables, por más que uno los diera vuelta para cualquier lado. De hecho, también hubo una señal elíptica cuando en la Ceremonia de Teatro Municipal aquel 23 de Diciembre del 2003, el Intendente asume su cargo con el tema “Aquellas pequeñas cosas” sonando en los parlantes, tierna canción de Serrat que decía:
"Uno se cree que los mató el tiempo y la ausencia.
Pero su tren vendió boleto de ida y vuelta."
Para Saldívar "esta fue su forma de anticiparnos que -pase lo que pase - él siempre regresaría. Es que según el dogma de la Hermandad Lopista, la Muerte Política no existe. Ellos esperan con devoción la Resurrección de la Carne Decomisada y la Achura Perdurable... Amén.”
Cabe preguntarse entonces si - a la larga - el Código Rodolfo logrará ser más poderoso que el otro Código... el Penal.
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